Ubicadas al Oeste de Sumatra en Indonesia, se encuentran las islas Mentawais, un archipiélago paradisíaco.
Estas islas son mundialmente conocidas por sus olas perfectas, playas de arena blanca y aguas cristalinas. En una de ellas, se encuentra ubicado el exclusivo alojamiento “Botik Resort”, un hotel enfocado a un turismo responsable.
Tras varios días en la ciudad de Padang buscando cascadas, visitando mezquitas y comiendo miegoreng en puestos callejeros, pusimos rumbo a nuestro destino. Nos subimos al ferry que nos llevaría al puerto de la isla de Siberut.
Tras unas horas de travesía y nada más atracar, cogimos el barco que te nos llevaría a la isla privada donde se encuentra el Botik Resort.
Ahí, entre palmeras de cocoteros, agua cristalina y arena blanca, viven Iñigo y Debi. Ellos son una pareja de viajeros amantes del mar que, tras años viviendo en diferentes partes del mundo, vieron en Mentawais un lugar donde asentarse por un tiempo. Debí e Íñigo regentan este exclusivo hotel que Mario, su fundador, construyó hace varios años.
El hotel consiste únicamente de 3 cabañas escondidas entre las palmeras y hechas con mucho gusto a base de materiales naturales y madera proveniente de la propia isla. Únicamente pueden alojarse aquí un máximo de 12 personas, para preservar así la paz y tranquilidad del lugar, convirtiéndolo en un lugar de puro lujo.
Además, en la cabaña principal, se encuentra el comedor y punto de reunión donde compartir experiencias. Debí e Íñigo cuentan con un equipo maravilloso de trabajadores locales que hacen que la experiencia en este lugar sea tan única. Aparte de ellos, en esta isla únicamente vive una pequeña comunidad de gente local.
Debí es la encargada de que todo funcione a la perfección, las reservas, las comidas, la gestión de los trabajadores. Íñigo, fotógrafo y cámara profesional, disfruta grabando todo lo que tenga que ver con el surfy la vida marina, dedicando mucho tiempo a sacar fotos a los clientes en el agua y a pescar los peces que cenamos como ceviche.
Nuestros días en la isla giraron en torno al surf, la pesca y el buceo. Además de esto, no hay mucho más que hacer aparte de tirarte en una hamaca, leer un libro o pasear a orillas del mar alrededor de la desértica isla.
Cada mañana, después de desayunar, los huéspedes suben a las embarcaciones de madera para navegar a través de las cristalinas aguas y buscar olas perfectas. Aunque el hotel dispone de embarcaciones equipadas, hay ocasiones en las que tienes la suerte de navegar en la pequeña y estrecha canoa de madera de estilo Mentawais.
Surfeas hasta saciarte para después dedicar tiempo a pescar en los coloridos corales del archipiélago. El Botik Resort está rodeado por decenas de islas en las que únicamente hay palmeras y otros alojamientos camuflados con la flora del lugar.
Sin embargo, las Mentawais no son solo olas perfectas y aguas cristalinas, sino que son el hogar de una de las tribus más únicas e interesantes del mundo, la tribu Butui.
En esta zona de la isla de Siberut, aislados y en la selva tropical, viven Aman Ibu y su familia. Además de ellos, en esta zona viven otras 40 familias de la misma tribu. La única forma de llegar hasta su hogar es navegando a través de la selva durante varias horas en una de las estrechas canoas de madera tradicionales
Los Mentawais son una tribu de cazadores recolectores, siendo de las pocas comunidades del planeta que continúan viviendo de manera totalmente sostenible. Además, son animistas, creen que todas las plantas y animales tienen alma.
Tras horas conduciendo por preciosas carreteras rurales en una pequeña camioneta y navegando entre islas, manglares y selva, llegamos hasta el camino embarrado que nos condujo a casa de Aman Ibu. En esta, conviven el, su mujer y dos de sus hijos.
Aman Ibu es uno de los Sikerei (chamanes) de la comunidad, líderes espirituales y encargados de transmitir el legado y cultura a otras generaciones. Aman Ibu viste de manera muy sencilla, únicamente porta su kabid (taparrabos) collares y tatuajes. Para ellos, los tatuajes son muy importantes y cada uno guarda un significado, relacionados con la caza y la pesca. Estos tatuajes se hacen con ingredientes naturales como caña de azucar y es un Sikerei el encargadode realizar esta labor. Su mujer, tatuada también, viste una falda hecha de hojas de plátano y una camisafloral. Además, tiene los dientes limados. Es muy común que las mujeres se limen los dientes como símbolo de belleza.
En medio de un terreno selvático repleto de árboles se encuentra la Uma, o casa de la familia. Una construcción de madera y techo de paja, hecha con la típica arquitectura Mentawais. Cerdos y pollos campan a sus anchas por toda la parte baja de la casa. Para acceder a la estructura superior, han colocado un tronco tallado a modo de escalera.
En cuanto a la distribución de la casa, el espacio es totalmente diáfano y minimalista. El único mueble es una silla de madera y una mesa con bancos corridos en la entrada de la casa. Esta la utilizan más bien para charlar y compartir, no tanto para comer. En Mentawais, como en todo indonesia, se come en el suelo, con las manos, y compartiendo del mismo plato.
No hay electricidad y la cocina de leña se encuentra situada en el medio del salón, protagonizando el espacio, ya que el día a día gira en torno a la comida. Sobre la cocina se encuentra una chimenea rodeada de cráneos de monos que cuelgan a modo de protección. Hay un pequeño cuarto al final de la casa que es donde duermen el Sikerei y su mujer, sobre esterillas de bambú. En un pequeño doble techo, se encuentra la única cama de la casa a la que se accede mediante unas escalera y en la que duermen sus dos hijos. El suelo está hecho a base de tablas de madera.
La jornada, aunque muy tranquila, transcurre en torno a la caza y la preparación de los alimentos. Al ser animistas, es común que los Mentawais celebren rituales donde sacrifican animales y ofrecen su alma a los dioses.
** LAS FOTOS DE LOS BUTUI FUERON TOMADAS CON CAMARA GOPRO DE BAJA CALIDAD
Son los hombres los que salen a cazar, sobre todo monos y cerdos. Para ello utilizan sus lanzas, untadas en veneno extraído de las plantas de la zona. Tuvimos la suerte de poder salir a intentar cazar algún mono, sin embargo, no hubo suerte pero fuimos testigos de como fabricaron un kabid (taparrabos) desde cero y únicamente utilizando la corteza de un árbol.
Por otro lado, las mujeres son las encargadas de pescar. Pescan en los ríos ayudándose de reteles y finas cañas de bambú puestas a su espalda a modo de mochila. Uno de los últimos días, salí con ellas a pescar rio arriba y me enseñaron esta tradición milenaria. Logramos pescar algún pez que comimos después con arroz. Sin embargo, durante los últimos años, la pesca ha disminuido y no es tan común ver a las mujeres realizando esta labor.
En cuanto al sagu, este es el nombre que recibe el árbol de donde proviene el alimento principal de esta comunidad. Los Mentawais extraen la harina del sagu, la desmigan y la utilizan de varias formas en casi todas sus comidas. Son las mujeres las que desmigan el sagu, hacen rollitos, lo envuelve con hojas de plátano y lo ponen a la brasa. El sagu es utilizado también para alimentar a los animales de sus terrenos , como cerdos y gallinas.
Sin embargo, aunque la tribu Mentawais sea de las más únicas y sostenibles del planeta, su cultura y tradiciones corren peligro de desaparecer.
En definitiva, las Mentawais son un paraíso que ofrece muchas sorpresas para aquellos que busquen algo diferente y enfocarse hacia un turismo más sostenible, un lugar remoto donde conectar con la naturaleza y la cultura de la región.